Cierto, la vida se hace en momentos…


Blog escrito por: Laura de Lunne

Enero 1° 2013

TERCER ESCRITO:

Somos la única chispa de luz, con vida propia, avancemos sin temor,

Hasta mañana!


lunes, 26 de octubre de 2015

Poderoso Trueno, un indígena americano un “facilitador”, un buscador de soluciones respecto al existir



… los indios son del Agua, vienen con el Agua. Y representan la Claridad de nuestros pensamientos y la humildad del Alma. “Hay que respetar la Naturaleza”: Pluma Blanca

I Parte

Esta es una historia real


Laura De Lunne estaba soñando cuando vio por primera vez a Poderoso Trueno, un indígena norteamericano vestido con chaqueta beige de piel volteada que en Tamaulipas México le llaman cuera, el pantalón parecía de tela suave pero gruesa y el calzado era silencioso. No llevaba armas de ningún tipo, ni plumas en su cabeza pero tal vez sí en su nuca, entre el cabello largo recogido de alguna manera.

Poderoso Trueno sonríe, parece que vive “su vida” sin preocupaciones. Sé que se ha asignado o aceptado algún tipo de misión con o para su pueblo. A mí también está ayudándome de cierto modo que aún no descifro en su totalidad. Ha hablado conmigo de cosas lógicas del diario vivir, preguntas y comentarios acerca del donde estoy y que hago pero sobre todo que más puedo hacer de lo que ahora hago. Yo le llamaría un “facilitador”, un buscador de soluciones respecto a los problemas del existir, sin tiempo y para todas  las generaciones.

El trueno es poderoso, como la evolución, como el porqué de mi existencia y ese aprender cómo hacer las cosas mejor. He visto algunas veces a Poderoso Trueno en mis sueños y sin desperdicio todas esas oportunidades han sido muy significativas, como aquella mañana en que me operaron por un diente cuya endodoncia estuvo mal hecha y me creó problemas, en esa ocasión estando en la mesa de operación, al despertar de la anestesia me di cuenta de que Poderoso Trueno había estado ahí mientras me operaban, en un diálogo fluido sobre algún tema que se interrumpió cuando de repente sentí que entraba a mi nariz un medicamento que me despertó de  súbito causándome una fuerte molestia en mi respirar.

Al abrir los ojos vi al Cirujano Dental, al que estimo y admiro, lo cual me tranquilizó. A mi derecha el anestesiólogo tenía cara de “ya está” muy a gusto de ver que la anestesia había estado muy bien aplicada y que yo estaba ya despierta. Me sentí agradecida, pero había sido muy abrupto el despertar. Lo más significativo, fue que Poderoso Trueno seguía ahí. Y como no quería dejar de platicar con él sonreí a mi Doctor y volví a cerrar los ojos asintiendo con mi cabeza a su pregunta de que si me sentía bien y de que si quería quedarme dormida un rato más. Lo oí decir que me llevaran a mi cuarto y volví a dormir.

Entonces mi amigo indígena, mirando al anestesiólogo, dijo: “Este hombre es muy tosco. Podrían despertar a las personas como un viento fresco sobre el rostro, solo bastaría con que”… y en eso me dijo el camillero, Profesora la vamos a llevar a su cuarto, ¿se encuentra bien? Respondí moviendo un dedo de mi mano diciendo “sí” pero ya no pude seguir en contacto con mi amigo, se había ido.

A los cuantos días que fui a revisión con mi Cirujano le conté mi vivencia acerca de despertar al operado con suavidad siguiendo una técnica que no alcancé a grabar en mi memoria porque me movieron para llevarme a mi cuarto. A esto, bromeando, me dijo el doctor muy bien Maestra, ahora mismo la voy a dormir para que me traiga el procedimiento completo...

La última vez que lo soñé  me tocò una melodía con una flauta –la he silbado en mi grabadora de audio, ya se las compartiré-, y por la mañana, justo antes de que cayera en el despertar, Poderoso Trueno me dijo: “Esta vida fuera de esta vida existe,  y nosotros siempre estaremos en contacto con ustedes”.


Continuará.

Nota de Laura De Lunne:
28 DE OCUBRE DE 2010 Inicio del Blog "misideasparati", 5 años, gracias a quien lo ha leído acompañándome en esta travesía de mi vida. Gracias a Carlos, mi amigo e hijo de mi alter ego que me ha enseñado a ir escribiendo.
Laura De Lunne y/o Carmen Elena Guerrero Ramírez


lunes, 19 de octubre de 2015

... se nutren de la sangre de sus soldados que envían a morir para lograr sus fines egoístas






Era verano en Muchavista, playa perteneciente a Campello en Alicante España,  época en la que  viajaba en Tram a la Universidad de Alicante ubicada en San Vicente del Raspeig. Tomaba este tren en su andén de Muchavista ubicado a escasos 30 o 50 metros de la orilla del mar Mediterráneo y así continuaba su travesía costeando el mar por un gran tramo dentro del trayecto que recorre hasta llegar a Alicante. 

Me bajaba en San Vicente del Raspeig a cuya Estación llegaba un autobús especial que nos llevaba directamente al campus de la Universitat d'Alacant que es su nombre exacto; el recorrido en el Tram es magnífico, uno se embelesa al ir viendo la mar pues hay tramos de más de 10 minutos continuos o aún más largos en contacto con esta maravillosa vista, a los veleros que atraviesan sus aguas, los surfistas si es que hay algunas buenas olas en la siguiente playa contigua a Muchavista que es la Playa San Juan y a algún barco de mediana envergadura.

Esta era la sensación aquella tarde en que regresaba en el Tram a casa en Muchavista cuando alrededor de 5 o 6 personas subieron a la parte delantera del vagón y de manera normal al principio, se sentaron todos. Entre ellos estaban dos jovencitos de alrededor de 16 años. Una señora mayor de aproximadamente 60 y dos mujeres jóvenes de entre 20 y tantos años. La peculiaridad es que tenían todos ellos un aire de familia, una forma de vestir algo más holgada que  en el caso de las mujeres sus faldas eran amplias y a media pierna de largo, sus cabellos oscuros y algo rizados recogidos de alguna manera; en cuantos a los jovencitos claramente mostraban el aspecto (de lo que decimos los que no sabemos distinguir bien cuando vivimos en España, como era mi caso) de gitanos. 

Habíamos avanzado un poco en el trayecto cuando uno de los jovencitos se levantó de su asiento platicando en voz alta a su amigo quien permanecía sentado (lo cual no se acostumbra en España por lo general). En unos pocos minutos dicho joven seguía hablando alto pero ahora miraba a los pasajeros. Las mujeres que subieron con ellos al mismo tiempo, no lo tomaban en cuenta ni volteaban a verlo.

No pasaron muchos minutos sin que dicho joven mostrara en su mano algo que tenía una funda como de navaja y amagaba al amigo con dicho objeto como jugando, seguía hablando fuerte y ahora hacía comentarios dirigidos a dos jovencitos españoles de alrededor 14 o 15 años que estaban sentados a mi izquierda y que no habían hecho ningún movimiento ni comentario relacionado con dicho pajarraco gritón, sino que iban desde el principio del viaje platicando entre ellos y como estaban a un lado mío –pasillo de por medio- los oía hablar de sus materias de estudio. Sin embargo el pajarraco se dirigía ahora abiertamente a ellos mirándolos, moviendo aquello que portaba en su mano y se veía claramente como la funda de una navaja, de esas que se accionan con resorte.

Y nosotros los pasajeros? Claro, con el alma en vilo. Nadie hablaba ya y todos estábamos tensos esperando lo que el chico iba a hacer o intentar hacer y seguro cada uno de nosotros pensaba de qué manera se iba a defender llegado el caso.

Los estudiantes se pusieron de pie accionando el botón rojo para la parada en la siguiente estación y tuvieron que empezar a caminar rumbo a donde se encontraba el pajarraco porque ahí estaba la puerta de salida. Lo hicieron lentamente y solo hasta la mitad del camino. El pajarraco se envalentonó y una de las mujeres jóvenes le dijo que se sentara ya, entre las risas de la mujer mayor y la otra joven que veían el comportamiento del pájaro de mala cuenta y al parecer les divertía.

Todos estábamos tensos, un señor muy mayor que venía en el Tram se quiso levantar y su acompañante otra persona mayor lo jaló y lo sentó. En eso, un hombre pasó por mi lado y se paró a un lado de los estudiantes, entre ellos y el pajarraco, quien se aquietó, dejó un tanto su actitud pendenciera y dio como un medio paso para atrás rumbo a su asiento; el Tram llegó a la estación se abrió la puerta y rápidamente se bajaron los estudiantes protegidos por el cuerpo de aquel hombre, el pajarraco no dijo ni pío y el hombre sin voltear a ver al pajarraco se regresó a su asiento pasando de nuevo a un lado mío –yo estaba sentada a la orilla del pasillo- en ese momento levanté muy discretamente (el miedo no anda en burro!) el dedo pulgar de mi mano derecha en señal de “bien hecho, bravo!” él primero me miró serio y luego brevemente sonrió al pasar y se bajó a la siguiente estación con una chica.

Cuando el Tram volvió a avanzar el pajarraco, ya a salvo, le hizo señas obscenas por la ventanilla. En ese momento se abrió la puerta de la cabina del conductor y apareció un hombre quien llamó al pajarraco -porque el señor mayor que también se había apeado le dijo lo que pasaba al maquinista- pero dicho personaje le habló por su nombre y también con risas diciéndole que ya no fastidiara. Todos estábamos estupefactos por ese comportamiento tan poco profesional de quien debía protegernos, fue cuando este ayudante de maquinista o algo así, le quitó al jovenzuelo lo que éste traía entre-manos y lo abrió para exhibir así… un peine que aparentaba ser una navaja de resorte y que el cobarde pajarraco utilizó para amedrentarnos.

Que quien era aquel hombre que protegió a los estudiantes? (e indirectamente yo sentía que nos protegía a todos) Solo vi que era un gringo!!! Desde entonces, para mi decir gringo en lo particular ha sido signo de confianza y aplauso. Esos gringos que en cuanto a género/especie me caen mal por sus conflictos bélicos; pero este caso me hizo recordar que una cosa es el pueblo de cada país y otra sus gobernantes y sus cúpulas en el poder económico, ya que estos últimos son seres sanguinarios que se nutren de la sangre de sus soldados que envían a morir para lograr sus  fines egoístas de acaparamiento de riquezas naturales y comercio internacional, prácticas inicuas que no se necesitan explicar porque todos las conocemos.

Gracias gringo, donde quiera que te encuentres!




lunes, 12 de octubre de 2015

El agua corre hacia el poniente ahora y/o dos gatitos filósofos








“El agua corre hacia el poniente ahora, ha cambiado su anterior curso ya que todos los ríos y arroyos siempre corrían hacia el oriente hasta llegar al mar y eso presagia un designio: Que todo aquello que empezaste a hacer alguna vez en tu vida, regresa hoy en día, para que vuelvas a intentarlo sin olvidar que se requiere de un bravo corazón para volver a hacerlo ahora y conseguirlo” De esta guisa era la plática que yo escuchaba sentada en el Porche de mi casa. Créanmelo, creí que eran algunos grandes filósofos o místicos que deambulando por la ciudad –clásico en ellos- habían llegado hasta el lugar en donde yo vivo y he aquí que tenía la suerte de escucharlos e incluso, quizás, pudiera ser, hacerles una de esas grandes preguntas que todos tenemos dentro de nuestro ser pendientes de resolver….

Existe Dios?

Cristo es Dios o es el hijo de Dios?

Yo soy hija de Dios?

Si fuera así, entonces yo soy hermana de Cristo?

“Lo que yo hago ahora ustedes lo pueden hacer”, dijo Jesús El Cristo. Entonces somos iguales en esencia? Sin embargo sé claramente que somos diferentes, luego, si soy esencialmente su hermana, su parecida en las posibilidades es que soy su igual? Posibilidades, esa es la palabra y como me dice alguien, otra importante clave en el hacer humano es tener “congruencia entre lo que creo y  lo que hago” (Recordemos que todo lo igual, es diferente precisamente por ser igual y no lo mismo)

Ya ante este cuestionamiento, detuve mis pensamientos para ir rauda y veloz a buscar a esos grandes filósofos… Salí y … solo estaban maullando levemente el gato negro y mi amigo el gato rallado. Cómo??? Que??? No podían haber desaparecido aquellos sabios! My God! Par Dieu, Per Dio, Für Gott, Para Deus, Для бога, ああ!!!!!  Y más !!!!

La reflexión tocó mi mente ¿Sería posible? Los gatos, esos pequeños “seres insignificantes” llegarían a tener pensamientos? Y más aún, pensamientos existenciales! Los miré a los ojos, me miraron entrecerrándolos y abriéndolos como ellos suelen hacer y ambos al unísono hicieron miauuuu, dieron media vuelta y se fueron lentamente en fila india. Eso no tiene nada de raro lo excepcional fue que al llegar a la esquina voltearon también al mismo tiempo, mi miraron ronroneando y finalmente dieron vuelta desapareciendo de mi vista.

Quedé un buen rato en el mismo lugar, sin moverme, tratando de que aquella escena quedara gravada en mi mente porque cada vez que la recordaba, cada vez que la volvía a ver con los ojos de mi recuerdo, encontraba nuevas señales, nuevos sentires, nuevas vías de entendimiento, como eso de que están nuevamente en mis manos, en mi decisión de hacer, todas las posibilidades de realizar lo que no pude tiempo ha, de que puedo volver a intentarlo “con bravo corazón” y lograrlo, obtenerlo, vivirlo.

Bien, me he convencido me dije, no sin enviar un pensamiento de agradecimiento a aquellos dos gatitos, que digo por Dios!  quise decir a aquellos dos filósofos… pero, cuáles?
A donde se fueron si es que estuvieron ahí? Creo que tendré que pasar más tiempo en el Porche de mi casa y vigilar, vigilar, vigilar, que por algo ese gran Ser nos dejó dicho: “VELAD y PEDID!” Que traducido a mi entendimiento significa:  OBSERVEN el mundo en el que están y OBSÉRVENSE A SÍ MISMOS, dense cuenta de quienes son, que están haciendo en esta oportunidad de aprendizaje en esta vida en esta Tierra y pidan lo que necesitan para aprender cómo vivir mejor consigo mismos.

Sí, pidamos a manos llenas, que al Universo/Dios/Gran Espíritu/Fuerza Creadora o como ustedes quieran llamarle, le sobran recursos para darnos…


lunes, 5 de octubre de 2015

Por quién llora María de la Luz, por otros o por ella misma? Hemos sido alguna vez un/una María de la Luz?





Ante  una noche de descanso completo –de las 10 de la noche a las 6 de la mañana ininterrumpidamente (!)-me dije este es  el día perfecto para iniciar el fallido intento de caminar en la frescura de las primeras horas del día, y sin pensarlo más me levanté y me fui a la tienda de 24 Horas –recorrido de 7 cuadras de ida y otras de vuelta, pero recorrido al fin- .  La intención era comprar harina y como regalo por ser disciplinada en caminar (aunque solo  era el primer día) una coca cola.

Pero estaba la máquina de café, y contra mi voluntad y todas las voluntades del mundo, me compré un vaso chico. De repente se me calló un poco al piso –es que lo llené mucho para aprovechar la compra al máximo- y coloqué  unas servilletas sobre el líquido, de repente vi una mano que tomaba dos servilletas más y las colocaba en el lugar; Gracias! 

Era María de la Luz e iba a su trabajo; este día le tocaba lavar la ropa del bebé de esa casa en donde es  la Asistenta. Ah que bien le dije y agregué, Tiene usted  algún  día libre para que me ayude a mí?

Le dije que anotara mi número telefónico, no lo pudo hacer. María de la Luz no sabe escribir ni leer, tampoco dijo conocer los números. Le anoté en su celular mi teléfono obligándole a que leyera cada número que yo anotaba en su móvil que ella usa como alarma para saber la hora de salida de su trabajo. Excepto el número 6 supo los demás números. Y  dijo que le era más fácil caminar conmigo rumbo a mi casa y así guardaría en su memoria  el lugar.

En casa la invité a pasar y ya sentadas tomando nuestro café y luego de saber cuántos dolores en el cuerpo tenía ella y cuantos yo, me dijo “cuando yo me enferme no voy a tener a nadie que me cuide”; Pero María de la Luz dices que tienes 6 hijos de los cuales actualmente 3 son de 19 a 26 años, alguno te cuidará… No, ninguno, ahora yo trabajo y les doy de comer a todos, incluyendo a su papá. Pero –arguí-  ellos te dan algo de dinero? El padre me da 700 pesos por semana y solo uno de los hijos me da 300 pesos por semana pero yo pago la renta y los servicios básicos además de la Despensa porque  todos comen en casa de lo que yo compro cada semana y que es dinero de mi trabajo como asistenta en varias casas. Así que si un día me muero ellos no van a saber que hacer para vivir, no podrán vivir solos.

Esperé un poco a que sus lágrimas se secaran y le dije: A ver María de la Luz, dime ¿Cuándo naciste con quien naciste? Nací sola! Y cuando te mueras, con quien te tienes que morir? Pues con nadie, creo que me moriré solo yo en ese momento. Bien, entonces naces sola y mueres sola, Cierto? Sí, así es. Bien entonces, no crees que tus hijos son iguales a ti que nacen solos y morirán solos? Pues no sé.

Mmmmh vamos a ver, contéstame esta pregunta:  Has visto o sabido que existen niños huérfanos de madre? Sí, sé que existen. Bien y esos niños has visto que crecen y se hacen personas mayores aunque su madre se ha muerto? Sí, los he visto, pero si yo me muero mis hijos no van a sobrevivir porque yo soy quien los mantengo!
…….

Pues María de la Luz, tómate tu café para que no se enfríe.